viernes, 4 de abril de 2008

23

Me quedo esperando frente a la PC, hasta que una idea se desarrolle sola. Algo ha pasado en el día y tengo que redescubrirlo. Por ejemplo, hoy vi un avión a lo lejos y pensé que un pasajero contemplaba la ciudad desde su ventana.

Soy una partícula para ese pasajero.

Y luego pensar. Hay una partícula, abrochándose su cinturón de seguridad. Un avión lleno de partículas que ruegan por llegar pronto a casa. Solo quieren volverse grandes de nuevo.

5 comentarios:

Kat dijo...

Y pensar que a veces, ni siendo partículas, podemos ser apreciados...

Mujeres dijo...

Muchas veces cuando vivía en Nueva York y subia a los rascacielos, me quedaba contemplando las calles desde lo alto, y siempre me venía a la mente la imagen de un hormiguero. El tamaño, el ir y venir de las personas con sus rutinas, sus movimientos, su comportamiento... turbulencias de la mente en las alturas.
Ingui

Unknown dijo...

y si... no somos nada,solo que los argentinos no estamos enterados!
cual seria el colmo de un argentino?
caerse de su ppio ego...je je, ni hablar de saberse particula no?
salutes!

Alejandro Vargas dijo...

Te recomiendo el cuento de Julio Cortázar de "La isla a mediodía" se asemeja un poco tu idea con el cuento.

Saludos!

Alleda Vodienova dijo...

Perfecto